En una caldera de vapor acuotubular, a diferencia de una pirotubular, el agua circula por el interior de los tubos. El calor que se genera y los gases de combustión que rodean los tubos calientan el agua que circula en su interior. Muchas calderas acuotubulares funcionan según el principio de la circulación natural del agua (también conocido como “termosifonado”).
La capacidad de este tipo de calderas puede incrementarse si se aumentan el número de tubos que forman parte de ellas.
