Las sales disueltas que puede contener el agua de entrada a la caldera disminuyen su solubilidad al alcanzar elevadas temperaturas, y se depositan en las paredes afectando al calentamiento de las superficies y al circuito.
Es más probables que aparezcan incrustaciones si el agua que circula por el circuito es dura, es decir,contiene gran cantidad de minerales disueltos, como carbonatos, sulfatos de calcio, o silicatos.
Las incrustaciones son francamente difíciles de eliminar, es mejor prevenirlas.
Las incrustaciones se agarran principalmente a la base de la caldera, donde el agua puede quedar depositada por gravedad, por eso es recomendable contar con diferentes puntos de control distribuidos por el circuito donde realizar purgas automáticas de sales, como tienen las calderas ATTSU.
