La principal característica de la caldera de vapor GE Inox es que está diseñada para consumos medianos y pequeños. De ahí su reducido tamaño que destaca también por su capacidad para aprovechar la energía térmica a través de resistencias sumergidas en agua.
Con un rendimiento máximo, es de fácil mantenimiento y muy flexible en su funcionamiento. Además, también cuenta con aislamiento térmico de baja conductividad y alta densidad.