El mantenimiento de una caldera pirotubular no solo es una cuestión de eficiencia operativa, sino también de seguridad y cumplimiento normativo. Para garantizar que funcione de manera totalmente confiable es fundamental realizar inspecciones, limpiezas y ajustes periódicos.
El diseño pirotubular es común en muchas calderas industriales debido a su eficiencia en la transferencia de calor y permitiendo manejar grandes volúmenes de vapor. Sin embargo, no realizar un buen mantenimiento de las calderas de este tipo puede suponer un riesgo importante. Estas son algunas de las razones:
Seguridad: Cuando una caldera no se mantiene adecuadamente pueden producirse fallos en los componentes críticos. Esto puede desencadenar en fallo de algún control de seguridad, fugas de agua, escape de gases e incluso explosiones por fallo de los controles y seguridades. También pueden ocurrir averias y paros en la producción de vapor no previstos en la producción industrial o en otros procesos en los que deba haber generación de vapor.
Eficiencia energética: La acumulación de depósitos de sedimentos en los tubos, contar con problemas en los controles de combustión o una falta de ajuste en los quemadores suele ir asociado a un mayor consumo de combustible y a costos operativos más altos.
Durabilidad y vida útil: La corrosión, la erosión y otros desgastes pueden afectar negativamente a los componentes de la caldera y, en consecuencia, a la preservación de su integridad estructural.
Cumplimiento normativo: Es esencial para evitar sanciones legales y garantizar un entorno de trabajo seguro.
Protección del medio ambiente: Una combustión ineficiente puede generar emisiones de gases nocivos. El mantenimiento adecuado de las calderas pirotubulares reduce las emisiones contaminantes y en consecuencia el impacto ambiental.
Attsu realiza, además del diseño y fabricación de calderas industriales, reparaciones y servicios de mantenimiento homologados. Nuestros servicios abarcan desde contratos de control anual reglamentario, hasta contratos de mantenimiento programado preventivo.
Nuestras inspecciones periódicas de calderas pirotubulares incluyen las siguientes tareas:
- Revisión de documentación sobre la operación y calidad del agua.
- Limpieza del circuito de humos y partes a presión.
- Revisión de accesorios y cierres de cajas de humos.
- Cambio de juntas afectadas.
- Pruebas de funcionamiento y puesta en marcha.
- Control de estanqueidad.
- Inspección de tuberías y equipos que utilizan el fluido.
- Ensayos de funcionamiento y automatismos de seguridad.
- Prueba hidrostática.
- Ensayos no destructivos mediante partículas magnéticas o líquidos.
- Realización de certificado de inspección periódica.
En Attsu nos adaptamos a las necesidades de nuestros clientes. Contáctenos si necesita un servicio de mantenimiento de una caldera pirotubular para que le hagamos presupuesto a medida y de acuerdo a sus necesidades.