Sí es posible la producción de vapor por parte de una caldera a partir de corcho. De hecho, Attsu cuenta con un modelo de caldera de vapor (el CSPM-1000/12) que está especialmente diseñada para producir 1.000 kg/h de vapor a una presión de 12 bares a partir de la combustión de corcho y sus derivados. Los mismos residuos procedentes del proceso de fabricación de este material son los que se usan para producir el calor necesario que se precisa en este tipo de industria.
El vapor resultante es totalmente seco y de alta pureza, y su objetivo es el preparado, secado y esterilizado de tapones de corcho. Con el uso de este tipo de caldera, la generación de carbono es mínima y el ahorro en combustible puede alcanzar los 215.000 litros en un año.