Las calderas que están preparadas para ser montadas en el exterior se identifican con un símbolo que describe el grado de protección de sus partes eléctricas frente a las condiciones ambientales como pueden ser la humedad, las partículas de polvo, u otras.
Las siglas IP corresponden en inglés a "Ingress Protection" (protección ante la entrada)
Después de las siglas IP van dos números, el primero, del 1 al 6, indica el grado de protección contra partículas que pueden entrar, es decir, cómo de herméticas son las puertas del cuadro eléctrico ante la entrada de polvo. El 6 es el grado que la mayoría de aparatos al aire libre presentan, y garantiza que ese equipo es totalmente hermético contra el polvo y partículas incluso con aire continuo, como pasaría por ejemplo en una instalación a los cuatro vientos.
El segundo número es el que define el grado de protección frente a la humedad.
Habitualmente los equipos suelen fabricarse entre los índices IP65 a IP68. El 5 es un grado de protección contra chorros dirigidos de agua a baja presión, y el 8 corresponde a un equipo que funciona sumergido a gran profundidad. A más humedad soportada, mayor es el valor de este índice.